Esta semana Sony desveló los detalles de la nueva y esperada PlayStation 5 y como no podía ser de otra manera sus características son espectaculares.
A rasgos generales podemos decir que la nueva PS5 montará una CPU de 8 nucleos Zen 2 a 3,5 Ghz, GPU de 10,28 TFLOPS y 16 GB de memoria GDDR6, lo que llamo la fuerza bruta, con este arsenal si o si irá como un tiro.
Si la PS4 Pro ya era capaz de reproducir en 4K, la nueva PS5 aumentará la posibilidad de reproducción a 8K y pensar que yo aún tengo una Tv HD Ready.
Sony ha hecho mucho hincapié en el apartado de audio y no es para menos, la nueva Playstation incorpora audio tridimensional incluyendo la la tecnología del motor Tempest que lleva el sonido 3D a otra dimensión.
Llegamos al apartado de almacenamiento, uno de los componentes más importantes en una consola tanto por el tamaño como por la rapidez de carga de los juegos. Sony opta como no podría ser de otra manera por un disco SSD sorprendentemente de 825 GB dejando los tamaños de la PS4 de 500 GB o 1 TB.
La parte positiva de la inclusión de este disco duro SSD es su velocidad, no descubriremos ahora las bondades de los Discos SSD, sin duda los usuarios notaran mucho esta mejora incluso más que el aumento de potencia que al final sabemos que esa potencia queda diluida en cuanto salen juegos aprovechando al máximo esa potencia.
La parte negativa son esas 825 GB que sabemos que son insuficientes para almacenar unos pocos juegos actuales junto con sus futuras actualizaciones, pero Sony ha pensado en ellos y ha incorporado una ranura PCIe 4.0 para unidades NVME por lo que podemos esperar que Sony ya tiene Preparado su accesorio para augmentar almacenamiento.
Su precio, la gran incógnita aunque expertos barajan que podría situarse en los 400€, un precio bajo para lo que ofrece pero que le permitiría competir con la nueva Xbox que llegará con mejores características.
Lo sabremos a finales año.
